sábado, 5 de octubre de 2013

¿AMIGOS REALES?

Al ver la cantidad de amigos que las personas tienen en Facebook me avergüenzo. No me estoy comparando a celebridades que parecen tener millones en su círculo íntimo. Estoy hablando del ciudadano promedio como yo, que ha acumulado amigos llegando a las cinco cifras y parece estar expandiendo continuamente su círculo de relaciones cercanas.
¿Qué pasa conmigo? El número de personas que considero verdaderos amigos no llega a los dos dígitos, a pesar de que soy una figura  con un gran número de conocidos.
Me molestó bastante hasta que finalmente lo entendí.
No es que tenga menos amigos que otras personas, es simplemente que me niego a aceptar que la palabra "amigo" sea devaluada por la inflación verbal. No dejaré que una descripción que debería reservarse para las relaciones más cercanas y significativas sea mal utilizada en asociaciones pasajeras con individuos que no tienen la menor idea o interés en mis penas y alegrías.
Yo creo que la inflación verbal es tan mala como la financiera. Degrada el valor de nuestras palabras al igual que la monetaria disminuye el valor de nuestras monedas. Recuerdo cuando el dólar valía algo; y, previo a la aparición de Facebook, me parece recordar que “amigo” significaba algo más que alguien que conozco por su dirección de e-mail. Joseph Zabara, el poeta y médico hebreo del siglo 13, lo expresó de manera memorable: “La amistad es un corazón en dos cuerpos”.
La amistad verdadera es un regalo de Dios, Él nos dijo en la Biblia: “no es bueno que el hombre esté solo”. Necesitamos comida para vivir, pero necesitamos amigos para que valga la pena estar vivos. Y los amigos, de acuerdo a Maimonides, tienen que demostrar su compromiso para ganarse este noble título.  Un amigo debe ser, primero que nada, “un amigo para ayudar”. Debe ser alguien con el que puedas contar, preferentemente incluso sin pedir ayuda.
Lo siguiente es que debe ser “un amigo para conversar”. Los amigos deben sentirse libres para comunicar sus pensamientos más profundos, sin importar cuán fuera de lugar les parezcan a los demás.
Finalmente, un amigo debe ser “un amigo en perspectiva”. Debe haber una visión en común, objetivos y valores compartidos. ¿Difícil de encontrar? Por supuesto. Es por eso que los amigos reales escasean. Y es por eso que encuentro ofensivo cuando la palabra es utilizada tan descuidadamente.
Ya no soy un jovencito, he vivido muchas cosas en mi vida. Hubo momentos en los que disfruté grandes logros. Y sólo los amigos verdaderos compartieron mi alegría. Escribí un libro que titulé  "El invierno de los pastores" en donde hablo precisamente de esto. ¿Amigos? Son muy pocos...
Lo que sé hoy es que cada amigo real es un milagro. Los milagros tienen que ser atesorados, y no deben ser esperados como algo dado, como si tuviéramos automáticamente derecho a ellos. Los amigos en Facebook pueden ser cientos, pero no son los que realmente cuentan. Mi lista es mucho más corta, pero es, por lejos, más significativa.
Y una cosa más. Le agradezco a Dios por cada amigo real, porque comprendo que tener incluso uno ha hecho que mi vida esté llena de bendición.
Y, asùstese: He querido ser amigo de algunos pastores y se han negado a darme su diestra de amistad. La amistad verdadera es cara: Hay que invertir mucho. Y no todos estàn dispuestos a invertir en una buena y verdadera amistad... Làstima.

2 comentarios:

  1. Amado pastor, como siempre me deleito en sus apuntes,y en este del cual me identifico plenamente no me queda más que decirle que gracias. Lo compartiré con aquellos que son contados con los dedos de mi mano. Le agradeceré también, que me haga llegar a mi dirección de correo rego7412yahoo.es(le pone la arroba) las notas que nos compartió en estos dos últimos lunes en la reunión para hombres. Estoy agradecido por ello y lo comparto con aquellos en quienes influencio, en las ovejas que el Señor me ha dado para apacentarlas. Quise buscar su correo en este blog y no lo encontré. Gracias de antemano y esperamos ser siempre edificados a través de su persona. Un abrazo fraternal.

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  2. Gracias por este hermoso mensaje donde nos ha hecho reflexionar a quienes tenemos en nuestras vidas como verdaderos amigos que Dios no ha dado ese privilegio y no caer en artimañas y engaños para valorizar la amistad, como dice Dios en su palabra
    Proverbios 18: 24 El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo;
    la cual doy fe que es una realidad en mi vida y estoy totalmente agradecido a Dios por ello, que Dios bendiga a cada uno de ellos, a usted y a cada una de sus familias.

    Att, Gustavo Serrano
    Y amigo hay más unido que un hermano.

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